En un principio, en marzo de 2014, se presentaron cargos contra 26 personas, entre ellas Mücella Yapıcı, de Taksim Solidarity, por «fundar y dirigir una organización» para actividades terroristas. Dichas personas fueron absueltas el 29 de abril de 2015 por el Tribunal Penal de Primera Instancia n.º 33 de Estambul. En este caso —también conocido como la primera fase del juicio Gezi— el abogado Can Atalay actuó de abogado defensor de sus clientes.

Cuatro años después del juicio, el 19 de febrero de 2019, Can Atalay y otras 16 personas, entre ellas Osman Kavala, fueron acusadas de organizar y financiar las protestas de Gezi. Originariamente, las protestas denunciaban los planes de urbanización del céntrico Parque Gezi de Estambul. Posteriormente, fueron creciendo hasta convertirse en un movimiento de protesta más amplio en 2013, que se reprimió violentamente. La demanda la presentaron 746 denunciantes, entre ellas y sobre todo, el presidente Recep Tayyip Erdoğan y sus ministros. Los 16 acusados, incluido el abogado Can Atalay, fueron condenados a penas de entre 606 y 2 000 años de prisión cada uno. Can Atalay y otros acusados fueron declarados culpables de intentar derrocar al Gobierno de la República de Turquía e impedirle desempeñar sus funciones. En el juicio se les acusaba de numerosos cargos graves, como saqueo, agresión y violación de la Ley de Conservación de la Cultura y la Naturaleza. En el juicio no se presentaron pruebas concretas de las acusaciones, aparte de llamadas telefónicas y tuits entre los acusados, sin función probatoria. A pesar de que quedó claro que en estas conversaciones no se respaldaba la incitación a la violencia, se concluyó que las sospechas eran suficientes. Se aceptó la denuncia y se inició el juicio ante el Tribunal Penal Superior de Estambul número 30.